Los ocultos beneficios de la ortiga

Hoy te presentaré a la Ortiga, una planta de nombre científico Urtica, más conocida por su tacto urticante que por las sorprendentes propiedades medicinales que contiene. ¿O eres de las que nunca ha recibido la «caricia» de esta mala hierba durante un paseo campestre?
La ortiga
Esta medicina silvestre que despierta tanta antipatía, es un arbusto dioico (hay machos y hembras) de color verde intenso por su alto contenido en clorofila.
Normalmente la encontrarás en dos de sus variedades:
- La ortiga mayor o verde (Urtica dioica), que como su nombre indica es la de mayor tamaño. Puede superar los 1.5 m de altura, es la menos urticante y la variedad que brinda una gama más extensa de propiedades terapéuticas.
- La ortiga menor o picante (Urtica urens) no es tan grande como su hermana, pues apenas supera los 50 cm, pero sí más urticante. Además posee menos utilidades fitoterapéuticas que podamos aprovechar.
Propiedades y beneficios de la ortiga
La ortiga tiene propiedades vaso constrictoras (hemostáticas). Eso significa que reduce las hemorragias, y por ello se recomienda su consumo en casos de dismenorrea o regla abundante. Así como para cualquier tipo de sangrado espontáneo, como el nasal tan frecuente en los niños.
Además, por su alto contenido en hierro y vitamina C, las ortigas son grandes aliadas para combatir la anemia y recuperar la energía, porque actúa como tonificante.
Su riqueza en potasio tiene un efecto diurético y depurativo, que la hace adecuada para el tratamiento de la cistitis y otras afecciones del aparato urinario.
También posee virtudes antiinflamatorias y analgésicas. Por lo que se emplea en el tratamiento de dolores musculares, hemorroides y hasta artritis.
Y aunque pensando en su tacto, parezca que solo produce alergias, también es capaz de sanarlas. Gracias al potente antihistamínico que contiene, la quercetina, mejora los síntomas de las alergias primaverales.
Cómo recolectar ortigas
La verás crecer por doquier a partir del mes de Junio, por lo que la época idónea para la recolección de ortigas es el verano, cuando los brotes son recientes y tiernos.
La parte inferior de las hojas no pica, y hay quien se aventura a tocarlas con las manos desnudas. En cuanto al nivel de picazón, también influye si se toca con el anverso o el reverso de la mano.
Aún con eso, yo no me la jugaría. Y si vas a ser tú quien las recolecte procura protegerte con guantes de jardinería y armarte con una tijeras.
¡Las ortigas se pueden comer!
Aunque te parezca sorprendente, de las ortigas pueden consumirse semillas, hojas y raíces, tanto en su versión fresca como desecada.
Solo hay que tener la precaución de manipularlas con guantes de goma y eliminar por completo los pelos de las hojas. Están repletos de ácido fórmico, resina e histamina, responsables de la urticaria que produce el contacto con la planta.
Destacar que hay quien se las come tal cual doblando las hojas, manteniendo la parte con vellosidades alejada de la lengua y el paladar.
Para deshacerse de los pelos urticantes basta con escaldar o machacar las hojas
Si te atreves a probarlas, a continuación te dejo algunas curiosas y sencillas recetas con las que disfrutar de las propiedades beneficiosas de las ortigas.
Las ortigas son mala hierbas que SÍ debes tener en tu jardín Click to tweetTortilla de ortigas y piñones
Para esta receta solo utilizaremos las hojas superiores, puesto que son las más frescas y jugosas. Tendrás que recoger bastantes porque al cocinarlas reducen, igual que ocurre con las espinacas.
Ingredientes y elaboración de la tortilla de ortigas
- 3 huevos.
- 200 gramos de ortigas.
- Un puñado de piñones.
- 2 dientes de ajo.
- Aceite de oliva.
- Sal.
- Tras lavarlas, escaldamos las ortigas en una olla con agua durante 1 minuto.
- Las colamos y repetimos el proceso con agua nueva, para evitar posibles sustos y picores posteriores.
- Colar y escurrir las ortigas.
- Mientras se cuecen las ortigas, hemos batido los huevos, agregado la sal, y pelado y troceado los ajitos.
- Saltear ajos, piñones y ortigas durante unos 10 minutos.
- Agregar el salteado al huevo y remover para distribuir los ingredientes.
- Cuajar en una sartén como haríamos con cualquier otra tortilla.
Infusiones de ortigas
En esta ocasión podemos preparar la ortiga seca o fresca (para el agua de ortiga), e infusionada con agua o aceite de oliva.
Té de Ortigas
Aseguran que un par de tazas diarias de té de ortiga son muy digestivas y mejoran los problemas urinarios y de próstata.
Si decides secar las ortigas en casa, extiéndelas troceadas en una bandeja a la sombra. De ese modo no perderás las semillas.
La preparación del té es sencilla. Infusionar una cucharada de ortigas secas por cada 200 ml de agua. Luego añade azúcar o miel al gusto para endulzar.
Agua de ortigas
El agua de ortiga es utilizada en dietas de adelgazamiento y como ayuda para eliminar impurezas del sistema linfático, por lo que es un zumo depurante o detox.
- Después de enjuagarlas, en una batidora de vaso introducimos un ramillete de ortigas (150gr), una manzana verde (con piel) y medio litro de agua.
- Trituramos y colamos para obtener solo el líquido.
Otra variante del agua de ortigas es la que resulta de hervir hojas de ortiga frescas durante 20 minutos. Tendremos caldo disponible para la preparación de otras recetas, como enjuague bucal o como bebida infusionada reconstituyente y tonificante, que además aumenta los niveles de testosterona.
Históricamente, la pasta de ortigas sobrante de esta cocción, se usaba como cataplasma tópica para el tratamiento de úlceras, acné, cicatrices e hinchazones.
Aceite de ortigas
El aceite esencial de ortiga se consigue macerando ortigas en aceite de oliva durante 3 semanas en un lugar protegido de la luz.
Aplicado en el cuero cabelludo, el aceite de ortiga previene y combate la caspa, la caída de cabello, lo hidrata, lo fortalece y le un mejor lustre.
Contraindicantes de la ortiga
Pese a que las infusiones de ortiga sean diuréticas, indicadas para la próstata, la anemia, el tracto urinario, la diabetes, la artritis o el síndrome premenstrual, no se recomienda su ingesta a las embarazadas, personas con la tensión baja o en los casos en que ya estemos siguiendo un tratamiento médico para controlar la diabetes.
Para finalizar, recordarte otra de las plantas silvestres que debes tratar con cuidado por los beneficios que ofrece, el Diente de León. Y que estos remedios naturales NO sustituyen a los medicamentos prescritos por especialistas.